Que esperar al final de la vida
Todos son diferentes, así que no es fácil decir exactamente qué sucederá cuando alguien se acerque al final de su vida. Pero en las últimas semanas y días antes de la muerte, es común experimentar ciertos cambios. Uno de los aspectos más desafiantes de ser un cuidador es aprender a lidiar con los cambios físicos que la persona que está cuidando experimentará cerca del final de su vida. Ver a un ser querido pasar por esta transición probablemente provocará una avalancha de emociones, y es posible que no estés seguro de qué esperar o cómo comportarte. En este video, te guiaremos a través de los cambios físicos que son comunes cerca del final de la vida, y te daremos algunos consejos sobre cómo manejar estos cambios como cuidador.
Uno de los aspectos más problemáticos de ser cuidador es aprender a sobrellevar los cambios físicos que la persona a tu cuidado experimentará a medida que llega el final de su vida.
Ver a un ser querido pasar por esta transición probablemente generará una avalancha de emociones y es posible que no estés seguro de qué esperar ni cómo comportarte.
En este video, te guiaremos por los cambios físicos comunes cuando se llega al final de la vida, y te daremos algunos consejos sobre cómo manejar estos cambios como cuidador.
Si la persona a tu cuidado tiene una enfermedad terminal, con el tiempo comenzará a disminuir lo que puede hacer. A medida que se torne menos capaz de realizar actividades físicas básicas, deberás brindarle cada vez más atención. Es importante estar preparado para los cambios físicos que pueden darse cuando la persona a tu cuidado se acerca al final de su vida.
Como cuidador, es importante estar preparado para los cambios físicos que se dan cuando la persona a tu cuidado se acerca al final de su vida.
Es posible que notes que pierde el apetito, lo que a veces puede causar una pérdida significativa de peso. Ofrécele alimentos y bebidas que le gusten y permítele comer cuando tenga hambre, no solo a la hora de las comidas. Está bien animarlos a comer, pero no intentes forzarla.
Si no está comiendo tanto, también notarás que irá al baño(alt for translation: va de cuerpo) con menos frecuencia, y es posible que se moje o ensucie.
Si comienza a tener dolor abdominal o vómitos, el profesional de la salud puede recetarle medicamentos para ayudar con esto.
Un cambio físico muy común es tener la boca seca o adolorida, así que recomiéndale que beba cuando tenga ganas y aséale la boda con frecuencia con una esponja bucal o un rociador humectante. Ofrécele alimentos suaves y frescos que no deba masticar y, si usa dentadura postiza, quizás sea más cómodo retirársela.
Es normal que las personas que se acercan al final de la vida se sientan muy cansadas. Notarás que la persona a tu cuidado dormirá más de lo normal y es posible que sea más difícil despertarla. En cierto punto, las visitas de amigos y familiares pueden ser demasiado agotadoras, así que intenta respetar sus deseos si dice que está demasiado cansada para recibir visitas.
También es posible que sufra de dolor, aunque quizás no te lo pueda hacer saber. Si se mueve menos y hacen una mueca cuando intenta moverse, es posible que le duela. Si crees que sufre dolor, consúltale al profesional de la salud si se puede ajustar la medicación.
Intenta moverla al menos una vez cada dos horas para prevenir las escaras, a menos que le duela demasiado moverse. También puede servir para el dolor el aplicar una almohadilla térmica, una bolsa de hielo o darle un masaje.
Aunque es posible que la piel comience a sentirse fresca al tacto, evita darle más mantas, ya que el peso adicional puede incomodarla y aumentar el dolor.
También es posible que experimente confusión, alucinaciones y cambios de humor severos. Puede ser muy difícil ver a su ser querido comportarse de una manera que no se parece a su personalidad habitual, pero haz todo lo posible por asegurarle que estás allí para ella y que está en un lugar seguro.
Otro cambio físico común esperable al final de la vida es dificultad para respirar. Es posible que a la persona a tu cuidado le comience a faltar el aire, que jadee o que suspire con un silbido húmedo. A veces, si se duerme en posición vertical en una cama de hospital o en un sillón reclinable ayuda, y el médico puede recetarle medicamentos u oxigenoterapia para aliviar algunas de estas molestias.
Cuando se está llegando al final de la vida, puede experimentar apneas de hasta 30 segundos o más. También puede desarrollar una respiración muy ruidosa que, aunque no es dolorosa, es angustiante escucharla.
Si comprendes estos cambios físicos, podrás prepararte para la etapa final de tu papel como cuidador. De ser posible, habla con la persona a tu cuidado sobre sus preferencias y deseos con anticipación, y no tengas miedo de buscar apoyo en tus amigos y familiares.
Ver a un ser querido acercarse al final de la vida nunca es fácil, pero puedes sentirse seguro sabiendo que estás tomando las medidas correctas para hacer que se sienta cómoda en este difícil momento.
Ve nuestro video sobre cómo crear un plan de atención avanzado para obtener más información sobre cómo brindar cuidados terminales.