Cuido de pies de persona con diabetes
El cuidado de los pies es importante para la persona de la que te encargas, especialmente si la persona tiene diabetes. Si la persona que cuidas tiene diabetes, puede perder la sensibilidad en sus pies. Esto puede causar lesiones como heridas y ampollas que no podrán detectar. La diabetes puede hacer que estas áreas abiertas sean mucho más difíciles de curar y pueden infectarse muy fácilmente. El cuidado adecuado del pie diabético puede ayudar a prevenir esto. En este video te mostraremos cómo cuidar los pies de alguien con diabetes para que puedas ayudarlos a mantenerse libres de infecciones.
Si la persona a tu cuidado tiene diabetes, es posible que pierda la sensibilidad en los pies. Esto puede causar lesiones, como heridas y ampollas, que ni siquiera sabe que tiene.
La diabetes puede hacer que sea mucho más difícil curar estas zonas abiertas, que se pueden infectar muy fácilmente. Con un cuidado adecuado del pie diabético, se ayuda prevenir esto.
En este video, te mostraremos cómo cuidar los pies de un diabético para que puedas ayudarlo a no tener infecciones.
¡Probemos!
Necesitaremos algunas cosas para comenzar.
Necesitarás dos bols con agua, uno con jabón y uno limpio para enjuagar, o puedes darle el cuidado a los pies después de la ducha o el baño en la cama.
Consigue paños y toallas, una lima de uñas y loción.
También necesitarás un par de calcetines y zapatos o chanclas antideslizantes.
Es mejor usar calcetines blancos para diabéticos, porque no se hundirán en el tobillo. La parte superior se estira bien, y el que sean blancos ayudará a ver si hay grietas con filtraciones o si se están formando ampollas. Si no consigues calcetines especiales para diabéticos, puedes usar calcetines blancos comunes y cortar el elástico en el tobillo si le aprietan.
Elijan chanclas o zapatos que tengan mucho espacio en el área de los dedos para que no se froten ni se formen ampollas. ¡Las suelas antideslizantes ayudan a prevenir caídas, lo que es bueno para todos!
Si no se duchó o bañó en la cama recién, comienza por lavarle los pies. Será más fácil si haces que se acueste en la cama para lavarle los pies, para que no necesites agacharte.
Con una toallita humedecida en agua con jabón, lava suavemente todas las superficies de los pies, con especial atención entre los dedos de los pies.
Enjuaga bien con un paño limpio y agua limpia.
Es importante no mojar los pies, ya que se puede resecar la piel o propiciar que se agrieten nuevas zonas.
Con una toalla, sécale muy bien los pies, especialmente entre los dedos.
Comprueba si hay grietas, ampollas, uñas encarnadas o zonas abiertas. Infórmale al profesional de la salud si ves algo de esto para que lo controle. Como siempre, no dudes en preguntarle a tu profesional de la salud local si tienes dudas.
Es posible que te preocupe lastimarla si le cortas las uñas o haces algo mal, pero te irá bien si utilizas los siguientes consejos:
Es mejor limarle las uñas rectas y quitar bordes filosos. No las limes demasiado cortas; lo mejor es limarlas justo hasta el borde de los dedos.
Puede ser más rápido usar un cortaúñas, pero se puede resbalar y cortar accidentalmente la piel. Recomendamos que uses una lima por seguridad.
Aplica loción cuidadosamente en los talones y las plantas de los pies. No coloques loción entre los dedos. La humedad puede hacer que crezcan bacterias.
Para terminar, ayúdala a ponerse calcetines para diabéticos limpios y zapatos o chanclas.
Para los diabéticos, el cuidado adecuado de los pies ayuda a prevenir infecciones que pueden ocasionar muchas otras complicaciones, como heridas o amputaciones.
Si realizas esto diariamente, prevendrás esos problemas y te ayudará a sentirte más cómodo al brindar esta atención.
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